Según se informó a las autoridades, además de las maniobras peligrosas de los conductores de los vehículos, también se estaba generando una afectación por parte de cientos de personas que se ubicaban sobre la vía a consumir bebidas embriagantes y sustancias alucinógenas.
Por lo anterior, a través de la intervención adelantada por la Policía Metropolitana, el Ejército y los agentes azules adscritos a la Secretaría de la Movilidad, se realizó este fin de semana un ‘plan candado’ en ese corredor vial, dejando importantes resultados.
De este modo, se logró la inmovilización de varios vehículos, toda vez que sus conductores transitaban sin casco, chaleco o en el peor de los casos, bajo el efecto de bebidas embriagantes.
Dichos operativos también se realizaron en la zona de Mirolindo en puestos de control conjuntos entre la Policía y los agentes azules.
«En un rato que estuvimos en ese punto, tuvimos más de 20 motos inmovilizadas por no tener SOAT, por no tener casco, chaleco o por conducir bajo el efecto del alcohol. Incluso hubo dos conductores a los que les quitaron sus licencias por conducir embriagados sobre la zona de Mirolindo», señaló Milton Restrepo, secretario de Gobierno.