El discurso de Gustavo Petro, con sus diferentes matices ideológicos deja entrever diversas propuestas en materia económica, social, ambiental y de relacionamiento con la comunidad internacional. La integración para afrontar las inclemencias del cambio climático se convierte en una bandera para garantizar la supervivencia del ser humano.
El electo presidente de los colombianos Gustavo Petro, ha propuesto una estrategia de cambio denominada “Diálogos Regionales Vinculantes”, buscando a partir de estos (diálogos) una reforma estructural del modelo de estado que permita poner fin a los conflictos que se han desarrollado históricamente en las regiones para alcanzar la convivencia y paz duraderas, además de la prosperidad económica y social a la medida de los territorios. Colombia es un país de regiones que presentan diferentes problemas y por lo tanto necesitan de soluciones focalizadas y precisas.
A partir de estos “Diálogos Regionales” se fortalecerán los procesos de descentralización y autonomía territorial que tanto reclama el país, especialmente en la ruralidad y periferia donde poco ha llegado la mano del estado. El Plan Nacional de Desarrollo no puede seguir siendo visto como un todo, pues muchas veces las políticas, estrategias y metas sirven solo para solucionar algunos problemas del país, pero no esos problemas que tanto afectan a las regiones y que en su gran mayoría son desconocidos por la miopía existente en los fríos escritorios capitalinos.
La primera Región Administrativa de Planificación conformada en el país fue la RAP-E Región Central, impulsada en su momento por Gustavo Petro, como Alcalde de Bogotá. Esto se logró gracias al marco normativo que dictan el Art. 306 de la CN y la ley 1454 Ley Orgánica de Ordenamiento Territorial. A partir de este primer ejercicio de descentralización y cambio en la estructura del estado, las diferentes regiones se han inspirado para integrarse a partir de Hechos Regionales como: Sostenibilidad Ambiental, Equidad, Gobernanza, Desarrollo Humano, Desarrollo Rural y Sostenibilidad Alimentaria, Investigación – CteI e Infraestructura, Logística y Servicios Públicos.
Los actores de cada región (RAPs, Gobernadores, Alcaldes, gremios y sociedad), deberán definir cuáles son sus prioridades para la construcción del nuevo Plan de Desarrollo. La Región RAP Eje Cafetero (conformada por Caldas, Quindío, Risaralda y Tolima) y la Región Pacífico (conformada por Valle del Cauca, Choco, Cauca y Nariño) ya tienen un gran avance en este proceso, pues sus Planes Estratégicos Regionales (recientemente elaborados y aprobados), tienen la lectura clara y fresca sobre las necesidades, diagnósticos, proyectos y/o alternativas de solución. De igual forma las otras RAP (Central, Caribe, Amazonía, Orinoquia y santanderes, entre otras), también han hecho o se encuentran haciendo el ejercicio, entendiendo lo que pasa en estos territorios. Lo anterior se convierte en una ganancia significativa para el desarrollo de los Diálogos Regionales y por supuesto para la construcción del Plan de Desarrollo que necesita el país.
Mientras algunos políticos quieren seguir manteniendo el ineficiente, obsoleto y paquidérmico modelo de estado centralista, las RAP, vienen cumpliendo su misión como entidades planificadoras, avanzando de la mano del DNP y algunos Ministerios, en la articulación metodológica y de propuestas para el nuevo “Plan Nacional de Desarrollo 2022 – 2025”. Será el nuevo gobierno el que ponga las cartas sobre la mesa para iniciar la construcción del cambio.