Su propuesta se basa en la transparencia absoluta en el manejo de los recursos públicos, impulso total al sector agropecuario a través de la construcción de vías terciarias, mantenimiento y apoyo a los proyectos productivos
Durante su vida pública y profesional Helvert González Mora, se ha preparado para gobernar a Chaparral teniendo la experiencia administrativa para que su territorio, tenga un proceso de transformación política y administrativa. Para el líder chaparraluno, su municipio requiere un manejo eficiente y transparente de los recursos públicos y una distribución equitativa del presupuesto que permita llegar a todos los sectores.
“En Chaparral en los últimos años ha perdido la productividad en el sector agropecuario, ha perdido su posicionamiento en el orden departamental y ha perdido los liderazgos locales producto de un reducido grupo político que ha manejado el municipio y que ha cercenado las oportunidades de crecimiento personal, profesional y económico”, dijo González Mora.
Helvert González, manifestó su propuesta se basa en la transparencia absoluta en el manejo de los recursos públicos, impulso total al sector agropecuario a través de la construcción de vías terciarias, mantenimiento y apoyo a los proyectos productivos para lograr que la población joven se quede en el campo y sea fuente dinámica de producción. Perfecto.
“Chaparral en el año 2030 tiene que ser un municipio organizado, con una nueva dinámica de política, que tenga una completa prestación de servicios públicos, con seguridad ciudadana, con una ciudadana universitaria que le permita educar a la población surtolimense y que la construcción del nuevo hospital sea un motivo de desarrollo y de integración regional”, indicó.
Helvert González Mora, viene de una familia con padres que fueron generosas que, siempre se preocuparon por las familias más humildes por lo que él decidió ser un líder político siguiendo el ejemplo: “Siempre he trabajado en beneficio de la población vulnerable. Hoy Chaparral reconoce que después de cuatro años de haber perdido el ejercicio político, seguimos en el territorio, pendiente de la comunidad, ayudando a los sectores que más hemos podido y lo más importante, hemos entendido que la política debe fortalecerse en unos lazos cercanos con la comunidad para escucharlos, para plasmar en nuestros programas esas ideas y para interpretar las inquietudes que ellos tienen y que las expresan tímidamente”.