Tuve la oportunidad de conocer y compartir muchas cosas con Don Gabriel, aprendí de Él, el valor de la palabra, la seriedad en los acuerdos y la visión empresarial, fui beneficiario como hincha de la alegría que nos produjeron sus decisiones, siempre asumió riesgos por nuestro equipo, siempre asumió las críticas. Con su estilo particular siempre dijo desparpajado lo que quería, no tenía cálculos, lo conocí más defendiendo sus convicciones.
Debemos recordar a Don Gabriel Camargo Salamanca, como uno de los nuestros, como un tolimense que adopto esta tierra y que nos dio más que muchos tolimenses, recordarlo por las buenas acciones, por las alegrías y las glorias que nos hizo sentir. El mejor homenaje que podemos hacerle es no dejar solo al Deportes Tolima, ni a Cesar, quien dijo “seguiré el legado, pero no me dejen solo”.
Por la memoria de Don Gabriel Camargo, debemos rendir un gran tributo para exaltar su vida y obra, acompañar a su familia, con sincero aprecio, rodearlos de afecto, acompañar a nuestro equipo, acompañar a Cesar para que continúe el legado de Don Gabriel Camargo Salamanca.
El Deportes Tolima, es Gabriel Camargo, somos los tolimenses, los hinchas y los ciudadanos, que nos ponemos la camiseta para ir al estadio o para sentarnos frente a un televisor a hacer fuerza, a reír, gritar o llorar, sigamos apoyando nuestro equipo, esa es la expresión autentica del aprecio por Don Gabriel, el mejor tributo y el mejor homenaje. Las raíces de mi tierra las llevo en mis venas, desde pequeño este orgullo herede y sin pensarlo yo me enamore, la tradición de un pueblo y su región, Tolima grande para mí no hay dos.