Pensé que era una historia para contarles a los hijos», cuenta uno de ellos, que no cree en la voluntad de paz de los grupos armados
Los grupos armados y las bandas criminales han disparado el número de denuncias por extorsión en los últimos cuatro años. Crédito: Santiago Rodríguez.
“Reciba un cordial saludo de las Farc-Ep. La siguiente es para que se presente el día 24 de agosto, a las 10 am, en la cabaña de Tello. No falten por ningún motivo”, dice una boleta que le llegó a un empresario agrícola en Huila para cuadrar la “vacuna” que debe pagar por tener negocios en zonas de la guerrilla.
El papel tiene los logos de las Farc y los rostros impresos de “Manuel Marulanda” y “Mono Jojoy”, antiguos comandantes de las Farc. Y aunque parece un recuerdo de los noventa, la extorsión es del 2023 y fue escrita por un “financiero” del Bloque Jorge Suárez Briceño de las disidencias de las Farc, conocidas como Estado Mayor Central, y que están en diálogos de paz con el gobierno de Gustavo Petro.
Este ha sido uno de los 10.263 casos de extorsión que fueron denunciados el año pasado en el país. La cifra más alta en 10 años según las cifras consolidadas del Ministerio de Defensa. Se trata de un delito que, a pesar del subregistro de denuncias, ha aumentado un 20 por ciento en los últimos cuatro años, según alertó la Defensoría del Pueblo, la semana pasada.
Ganaderos, empresarios, campesinos, comerciantes y hasta tenderos han sido extorsionados en el último año por parte del ELN, el EMC, el Clan del Golfo y bandas criminales. Grupos armados que durante ese mismo período han entrado en diálogos de paz con el gobierno o han manifestado intención de hacerlo. Pero ante el recrudecimiento de este crimen, sus víctimas ponen en duda su verdadera intención de paz y le hacen un llamado al gobierno para fortalecer la seguridad