Adicional al perjuicio por la extracción de los cables, cabe mencionar el robo de las tarjetas de control, aparato electrónico que se considera la parte inteligente del semáforo y que su reinstalación puede tardar más de tres meses debido a la complejidad de su fabricación.
Este año se han registrado tres pérdidas en lugares como la calle 15 con carrera Séptima, la calle 20 con carrera Primera y la calle 25 en el barrio Las Ferias.
Otro motivo que afecta la operatividad de la semaforización es la energía. Cuando se presentan fallas en este suministro el servicio queda suspendido y su retorno a la normalidad depende de las labores de mantenimiento de Celsia.
“Hacemos un fuerte llamado a la comunidad para que nos apoye y esté pendiente para contrarrestar este vandalismo que afecta la seguridad vial. Esto no puede seguir así. Actualmente tenemos 94 intersecciones y hemos intervenido el 70 por ciento de ellas con mantenimientos preventivos y correctivos”, mencionó Fabián Tinoco, director Operativo de la secretaría de Movilidad.
El funcionario agregó que “se está trabajando, con el SETP, para la modernización con equipos controladores que regularán el tráfico permitiendo un mejor flujo vehicular. Y no como los actuales que superan los quince años de antigüedad”, concluyó Tinoco.