Tal vez la más grave situación que vivimos, son muchos ciudadanos “sisbenizados” sin necesitarlo y otros que solo dedican su tiempo y actividad productiva a esperar para hacer las colas o asistir a los cajeros automáticos a sacar el dinero de los subsidios que tienen, en análisis profundo esto ha dado al traste con que muchos sectores de la población que cuentan con estas ayudas hoy no quieran trabajar, a muchos se les ofrece empleo formal y dicen “trabajo pero no me afilie a lo de ley porque pierdo el subsidio” afectando gravemente la economía productiva del país. Temo mucho, que personas hoy inscritas y beneficiarias de los nueve programas de subsidios del Estado colombiano hoy no son merecedoras de ellos y le están quitando la posibilidad a muchos colombianos en situación de pobreza de tenerlos.
Por eso hoy cuando el gobierno nacional anuncia cien mil (100.000) subsidios de un millón de pesos ($1.000.000) para los denominados “Gestores de Paz” asaltan muchas preguntas, como, por ejemplo: ¿quiénes son? ¿Qué van a hacer? ¿Quiénes harán seguimiento de su labor? ¿Qué perfil requieren? ¿Enviamos un mensaje negativo a jóvenes necesitados estudiantes y trabajadores?, estas y otras muchas dudas asaltan a la población, que también se pregunta en la calle, si allí no habría una cierta compra de votos en unos sectores donde el actual gobierno ha trabajado en profundidad y hoy tiene afinidad.
Queremos la PAZ REAL, la que pasa por la paz del Presidente Santos, la que hizo el presidente Uribe, el Presidente Pastrana y casi todos los presidentes, que ahora el actual gobierno llama “Paz Total”, lo importante es no volvernos a equivocar, en el entendido, que no podemos apagar fuego con gasolina.